6 Caminantes con un objetivo, llegar andando hasta Monzalbarba; un barrio rural de Zaragoza que se encuentra a 11 km, al noroeste de la capital aragonesa. A las 9 hrs, con puntualidad “prusiana” cerca del rastro de la estación Delicias, allí estabamos: Pilar, Pedro, Angela, Santi, Pablo, y Raul. Listos para iniciar la “andadica”. Una sencilla excursión para compartir y disfrutar en alegría con amig@s.
Mientras la ciudad de Zaragoza, comienza su semana de “pilares”. Nosotr@s nos alejábamos del bullicio festivo. El día había salido bastante estable, con algo de nubosidad, pero con buena temperatura para caminar, antes de la llegada de los fríos del invierno. El recorrido transcurre de manera bucólica por la margen derecha del río Ebro. Que llevaba un importante caudal, resultado de las últimas precipitaciones y deshielo de nieve del Pirineo.
A veces pasaba algunos ciclista por el mismo camino a toda velocidad, por detrás nuestr@, raudos sin tocarnos timbre; salvo una persona que si lo llevaba y lo uso amablemente para avisarnos.
Esta excursión, era un actividad de la sangha “Respira”, homenaje a nuestro gran compañero, Mariano Gimeno, al que siempre gustaba compartir con los demás estas “pequeñas” pero mágicas escapadas cercanas a nuestra ciudad. Sabía estar presente y contemplar la belleza que a menudo nos suelen pasar inadvertidas por falta de atención.
Para la sangha “Respira”, Thay es un gran maestro y un guía de vida maravillosa. Mariano nos ha mostrado su ser y eso ha sido algo maravilloso... Ha dejado una impronta de amor en nuestro corazón, que no olvidaremos.
Durante el recorrido vimos algunas cigueñas sobre los campos y a un águila surcar el cielo, y también escuchamos también el alegre y jugueton gorjeo del mirlo.
*Toca sobre la imagen del mirlo y escucharás su hermoso canto.
Ibamos cumpliendo bien los tiempos de la ruta. Así que paramos un “ratico” en la ribera del Ebro. Un lugar con muy buenas vistas... Y picamos algo para recuperar energía a mitad del camino. Un@s llevaban bocata, otr@s fruta o frutos secos.
Un poco mas adelante entramos en una Nogalera o nogaleda,un terreno con nogales parcialmente vallado. Y nos decidimos a entrar; pues es un entorno bastante idílico y propicio para meditar o realizar un paseo consciente, o así al menos nos lo pareció.
Pero no tardo en llegar la sorpresa del día, en un todo-terreno azul marino. Una amable pareja mayor, los dueños de la finca, para mas señas...Pero fueron muy comprensivos, la verdad, y nos dijeron que nos podíamos quedar ese rato para meditar.. Eso si, pero sobre todo que no se nos ocurriera al salir del campo coger nueces para llevárnoslas a casa,ja,ja,ja.. Pues ya habían tenido bastantes malas experiencias antes, por esa razón. Menos mal que todo quedó en paz y nos pusimos a meditar unos minutos bajo los árboles.
Tras la meditación , salimos al paseo principal y realizamos unos minutos de caminar consciente. Al acabar empezamos apretar al paso para poder llegar a Monzalbarba antes de las 13:30 y coger el transporte de vuelta a Zaragoza.
La cigüeña es el símbolo y escudo del barrio. Esta ave migratoria ocupa el gran nido existente en el campanario de la magnífica torre mudéjar del siglo XVI.
Antes de coger el autobús de linea, Pablo nos contó una interesante historia sobre el origen de bereber de Monzalbarba y su antigua denominación ”Manzil-Barbar”.
Foto de los excursionistas
Otra aventura “consciente” más de la sangha “Respira”.